Los Signos Comunes
Palabra-clave: “Flexibilidad”
Géminis, Sagitario, Virgo y Piscis, se llaman signos comunes y su intrínseca naturaleza está expresada por la palabra “flexibilidad”.
La fuerzas que actúan a través de los signos cardinales excitan al cuerpo físico y lo impulsan a la acción.
La fuerza de los signos comunes es mental y espiritual dando medios para la acción e incentivos para la nobleza de la vida.
Por lo tanto, los individuos impulsados por las fuerzas estelares enfocadas a través de los signos comunes son los trabajadores del mundo, no de los teóricos sino de los ejecutores, que efectúan las cosas industriales y que llevan a una existencia concreta los proyectos grandes o pequeños de valor para el progreso del mundo. Los signos comunes son todos dobles; dos de ellos son humanos: Géminis (los Gemelos) y Virgo (la Virgen). El tercero, Sagitario, el Centauro es humano parcialmente y solamente el signo cuarto, Piscis (los peces), está tomado del reino inferior. Ninguno es violento, sin embargo, sino por el contrario, son símbolos intensamente morales, intelectuales y espirituales.
Inestables como ciervos se mueven de aquí para allá, nada les convence y satisface permanentemente y ellos no desean nada tanto como el cambio constante. No importa lo bien colocados que estén, no pueden resistir mucho tiempo seguido la atracción que puede proporcionarles el establecerse en otra ciudad, el volar de un sitio para otro, y cuanto más lejos mejor. Por lo tanto, la vieja máxima “una piedra que rueda no junta moho”, se adapta especialmente a esta clase, porque sus hábitos errabundos hacen que sean pobres generalmente.
Asimismo gastan tan rápidamente el dinero como lo ganan o quizá más de prisa aun. De este modo estas personas navegan sobre el mar de la vida impulsadas por la corriente de las circunstancias. Las condiciones externas las dominan porque la falta de fibra les impide ejercer su individualidad.
Lo que acabamos de decir es cierto en la mayoría de aquéllos que están bajo la influencia de los signos comunes y responden a su fase inferior simplemente porque el lado superior es demasiado elevado para todos excepto para unos cuantos en nuestro estado de desarrollo actual. Aquéllos que consiguen despuntar en el mundo debido a la influencia de los signos cardinales y fijos llaman a aquéllos indolentes y no los juzgan buenos para nada; pero si los anteriores fueran desposeídos de la energía de los signos fijos y cardinales que los impulsan a la acción y colocados bajo el rayo común, ellos muy pronto verían el porqué de la falta de fuerza y aprenderían a tener compasión por aquéllos que deben vivir así impedidos durante toda su vida. Pero entonces, ¿cuál es la lección que debe aprender esta clase de personas?
del libro "El Mensaje de las Estrellas"
de Augusta Foss de Heindel y Max Heindel
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