El Cordón de Plata y lo Átomos Simientes
Capítulo VII
El Futuro del Hombre y sus Átomos Simientes
Los Átomos-Simientes en los futuros períodos mundiales
Hemos investigado la evolución de los átomos-simientes a través de los tres Períodos Mundiales involucionarios y todo el presente Período Terrestre hasta su final; ¿qué les sucederá a estos átomos-simientes en los Períodos subsecuentes: los Períodos de Júpiter, Venus y Vulcano?
La primera gran Iniciación "Da el estado de conciencia que será alcanzado por la humanidad ordinaria al final del Período Terrestre; la segunda el que todos alcanzaremos al final del Período de Júpiter; la tercera da la extensión de conciencia que será alcanzada al final del Período de Venus; la última confiere al Iniciado el poder y la omnisciencia que toda la humanidad alcanzará sólo al final del Período de Vulcano".
Al final de cada gran Período el cuerpo que ha llegado a la perfección, es convertido en sus fuerzas esenciales y agregado al siguiente vehículo superior.
Así es como al final del Período Terrestre, las fuerzas del cuerpo físico perfeccionado, son agregadas al cuerpo vital, el que entonces tiene todos sus propios poderes más los que el cuerpo físico. Estos poderes amalgamados son agregados al cuerpo de deseos al final del Período de Venus y éstos a su vez son agregados a la mente o cuerpo mental al final del Período de Vulcano.
Cada cuerpo fue dado como una "germen" que era también un "pensamiento-forma" como lo hemos indicado. Son las fuerzas Arquetípicas de cada cuerpo, elevadas a la perfección las que constituyen los poderes de cada átomo-simiente que son agregadas al siguiente vehículo superior cuando termina el Período Mundial.
Paralelamente con este desarrollo observamos el pleno florecimiento del Triple Espíritu y de sus tres poderes: el Espíritu Divino, el Espíritu de Vida y el Espíritu Humano (los tres juntos constituyen el Ego). Max Heindel escribe: "Durante la involución las Jerarquías creadoras ayudaron al hombre a poner en actividad el Triple Espíritu -el Ego- para construir el triple Cuerpo y adquirir el eslabón de la mente. Ahora, sin embargo, en el séptimo día (para usar el lenguaje de la Biblia) Dios descansa. El hombre debe trabajar para su propia salvación. El Triple Espíritu debe completar el trabajo y la ejecución del plan comenzado por los Dioses. El Espíritu Humano, que fue despertado durante la involución en el Período Lunar, será el más prominente de los tres Aspectos del Espíritu en la evolución del Período de Júpiter, que es el Período correspondiente en el arco ascendente de la espiral. El Espíritu de Vida, que fue puesto en actividad en el correspondiente Período de Venus y las particulares influencias del Espíritu Divino serán las más fuertes en el Período de Vulcano, porque fue vivificado en el correspondiente Período de Saturno.
"Los tres Aspectos del Espíritu son activos todo el tiempo durante la evolución, pero el Aspecto espiritual de cada Aspecto será desarrollado en estos Períodos particulares, porque el trabajo que debe hacerse es especial. "Así como era el polo negativo del triple Espíritu el que estaba activo durante la involución, así ahora es el polo positivo el que está activo durante la evolución, a medida que el Ego se abre paso hacia la Divinidad saliendo de la materialidad.
La triple alma es generada durante el tiempo en que el Ego está evolucionando hacia arriba y saliendo de la materia, siendo asimilada el triple Espíritu. Cuando el cuerpo es plenamente perfeccionado y sus fuerzas son agregadas al cuerpo vital, el "Alma Consciente" será asimilada por el Espíritu Divino. Esto no es instantáneo. Se lleva todo el "Día" del ciclo de Júpiter y es sólo en la séptima ronda del Período de Júpiter cuando el Alma Consciente es así asimilada por su progenitor el Espíritu divino.
Bajo la ley de analogía y a causa de que la evolución se acelera a medida que se aproxima al final, el Alma Intelectual es asimilada por el Espíritu de Vida en la sexta revolución del Período de Venus.
Finalmente en la quinta revolución del último Período, el de Vulcano, que es en el que la mente es perfeccionada, el Alma Emocional es asimilada en el Espíritu Humano, en la Región del Pensamiento Abstracto. Esta asimilación de la esencia del cuerpo de deseos nutre el tercer aspecto del triple Espíritu conduciéndolo hasta la perfección y el proceso de asimilación requiere todas las primeras cinco Revoluciones del Período de Vulcano.
Quedan dos revoluciones más de este Período en las cuales el Espíritu Virginal asimila en la mente todos los poderes del triple cuerpo y las esencias anímicas también son completamente asimiladas en el triple Espíritu. Conforme cada globo mundial se disuelve en el Caos, el Aspecto del Espíritu correspondiente a ese Globo es atraído por el más elevado de los tres Aspectos, el Espíritu Divino. Al final del Período de Júpiter el Espíritu Humano es absorbido por el Espíritu Divino. Al final del Período de Venus el Espíritu de Vida es absorbido por el Espíritu Divino y al final del Período de Vulcano la Mente perfeccionada, incorporando todas las maravillosas glorias asimiladas durante los pasados siete Días Mundiales, es absorbida en el Espíritu Divino. Max Heindel comenta: "No existe contradicción de lo anterior en la afirmación hecha en algún otro lugar de que el Alma Emocional será absorbida por el Espíritu Humano en la quinta revolución del Período de Vulcano, porque el último estará entonces dentro del Espíritu Divino".
Después de esto viene el "largo intervalo de actividad subjetiva durante el cual el Espíritu Virginal, que ahora ha absorbido en sí mismo todos los tres Aspectos, o poderes y todos los frutos de la evolución se fundirán en Dios, de Quién vinieron, para re-emerger en la aurora de otro Gran Día, como uno de sus gloriosos colaboradores."
Durante su pasada evolución sus posibilidades latentes han sido transmutadas en poderes dinámicos. Ha adquirido poder anímico y una Mente Creadora, como fruto del peregrinaje a través de la materia. Ha avanzado de la impotencia a la omnipotencia."
Esto es, cuando el Espíritu Virginal re-emerge de la unión con la Divinidad, aparecerá como un Dios-auxiliar capaz de proyectar en el espacio -en la Substancia Raíz Cósmica- los "átomos- simientes", ideas germinales y sus fuerzas Arquetípicas y pensamientos-formas, pertenecientes a un nuevo esquema de evolución, miembro de una Celestial Jerarquía como la que nos ayudó en nuestra evolución "desde el barro hasta Dios".
Así, del mismo modo en que las Jerarquías Celestiales son nuestros verdaderos progenitores, cuya semilla fue el modelo de nuestra evolución, nosotros llegaremos a ser los progenitores divinos de nuevas razas en nuevos sistemas evolucionarios cuando emerjamos en aquella aurora Cósmica sobre las alas del poder y de la sabiduría para ayudar a inaugurar un nuevo mundo -una galaxia, un universo- y hacerlo flotar como una rosa que se abre corriente abajo en las ondas del espacio.
del libro "Temas Rosacruces" Tomo Segundo,
de la Fraternidad Rosacruz de Max Heindel
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