martes, 6 de junio de 2017

El Mundo del Deseo (primera parte)




LOS HABITANTES DE LOS PLANOS

CAPÍTULO III

EL MUNDO DEL DESEO
(primera parte)

Hemos visto que los Ángeles, quienes fueron la humanidad del Período de la Luna, durante el cual lo que ahora es nuestro Sistema Solar estaba evolucionando en el plano etérico, poseían cuerpos hechos de éter, y que ahora, en el más denso Período terrestre todavía están trabajando en el plano etérico del Sistema Solar, incluyendo nuestra Tierra. Sin embargo, están haciendo progresos y avanzando hacia más altas condiciones, y así encontramos que, si bien sus "deberes" están principalmente en la región etérico del Mundo Físico, también actúan en el Mundo del Deseo. Max Heindel señala que los Ángeles trabajan con "las húmedas emociones", mientras que los Luciferes trabajan con las ígneas pasiones".

Para la visión clarividente el ovoide del cuerpo de deseos exhibe ambas cualidades, las emociones que forman los colores semejantes a nubes que se agitan a través del aura, haciendo que algunas veces se agrande hasta superar su tamaño normal en reposo y los detalles de energía que asumen varias formas, emanando de los vórtices del cuerpo de deseos y encendiendo el ovoide como rayos de luz o de relámpagos. Las formas semejantes a centellas generalmente acompañan a las rodantes masas de colores oscuros, incluyendo los escarlatas y rojos, que están asociados con los más violentos sentimientos incluidos en el término general de "pasiones".

Lo que se denominan "Infierno" y "Purgatorio" ocupa las regiones "inferiores" del Mundo del Deseo, o Mundo del Alma, como Max Heindel también lo llama.

En esos lugares existe una sensación de pesadez, que hizo creer a los antiguos videntes que el "Hades" está bajo la superficie de la tierra o en el abismo sobre el cual creían que nuestro planeta flotaba. Esto es lo que quiere dar a entender Enoc cuando dice que los Ángeles rebeldes cayeron como grandes columnas de flama al mismo borde del abismo, siendo idéntica la idea en el lenguaje popular cuando decimos que uno "sube" al Cielo, o se "hunde" en el Infierno. El hecho de que los Volcanes eructen llamas y humo también contribuyó mucho a la creencia de que el Infierno está en el ígneo interior de la Tierra, o debajo de ella. Dibujos babilónicos muestran la Tierra como un disco bajo el cual está el Infierno y el abismo y elevándose por encima, se ve la Montaña del Mundo con el Paraíso en su cumbre, en el que la humanidad infante caminó y habló con Dios, o con los dioses.

No obstante que los Ángeles se encuentran trabajando en el Mundo del Deseo, sirviendo a los Espíritus que se encuentran en el Purgatorio (Región inferior del Mundo del Deseo) y en el Primer Cielo, Región superior del Mundo del Deseo (también los Espíritus humanos se encuentran allí, tanto por la noche, durante el sueño del cuerpo, como en los grandes intervalos entre renacimientos) estas Jerarquías angelicales no son las más dominantes en el Mundo del Deseo. Los Arcángeles son las Jerarquías predominantes.

¿Quiénes son estos Arcángeles? Son la humanidad del Período del Sol, considerado Segundo Día Cósmico de la evolución de nuestro Sistema Solar. Aún entre esos exaltados Seres existen algunos que han caído detrás de la corriente principal de su evolución y pueden ser llamados "rezagados". A ellos, como a los Mercurianos y Venusianos, se les han asignado trabajos que pueden cumplir en la economía del Sistema, porque nada ni nadie puede "perderse". Algunos de estos Arcángeles trabajan bajo las órdenes del Dios de la Raza, guiando y perfeccionando a la humanidad y también a las varias especies del reino animal como Espíritus - Grupos. En el Mundo del Deseo los Espíritus de Raza sobre un país con sus habitantes, las cuales son literalmente inhaladas por ellos. Algunas veces aparecen en realidad en forma humana ante los vidente y visionarios que son sus mensajeros y entonces pueden tomar la forma de una imagen ancestral, apareciendo en grandiosa figura humana, con las magníficas alas de fuerza, irradiando un bello resplandor que los artistas han tratado de pintar en el arte sagrado.

La forma natural y básica del Espíritu Arcangélico es sin embargo, la esfera y aparece generalmente como unidad individual; o un globo brillante de luz y color que en ocasiones asume la semejanza de un ser humano. Ni los Ángeles ni Arcángeles tienen la obligación de tomar forma humana, porque no la necesitan; pero todo órgano y función del cuerpo humano es en realidad la representación de un principio y una actividad cósmica de modo que cuando cualquier ser superior de nuestro esquema evolucionario se manifiesta en "forma", mostrará siempre alguna semejanza con la figura humana.

Por esta razón siendo el "hijo del Hombre" el Arquetipo básico para la evolución de nuestro Sistema Solar entero todas esas oleadas de Vidas, se asemejarán al Cristo Cósmico.

"El Espíritu de la Raza" inspira a los Líderes de la misma, dondequiera que estén y no importe lo que sean. En la historia de los hebreos, el Arcángel Miguel guió al pueblo a través de su desarrollo, conduciendo a Abraham hacia la Tierra del Oeste, Canaán y hacia Melquisedec, cuyo heredero adoptivo llegó a ser.

Los "dioses", Jerarquías de las varias razas son en realidad estos Arcángeles representados como seres luminosos y radiantes, a menudo alados, que son adorados y amados por sus pueblos.

En la Biblia en el "Libro de Daniel" se habla de Arcángeles que guían el destino de las naciones y de el "Príncipe" Miguel de los Hebreos. Puesto que Atenea es el Espíritu guardián de Atenas, es evidente que el Arcángel es Mercurio o Rafael (para usar los nombres arameos que eran populares en la antigüedad y son todavía usados en las teosofías hebrero-cristianas.

Estos grandes Arcángeles guían a sus pueblos tanto en la paz como en la guerra por lo que se dice en la literatura sagrada que un Arcángel "pelea" contra otro. Algunas veces es mejor para una nación perder sus batallas y el guardián Arcangélico permite que esto suceda. Los clarividentes ven las columnas y nubes de brillante fuerza que denotan la presencia del Arcángel en tiempo de crisis nacional, cuando son necesarias las actividades en masa. Tal guía es visible en las grandes migraciones de pueblos, en los precursores de Ariana cuando emigraron de Atlantis y en las varias razas que se esparcieron por la Tierra después del Diluvio, cada una conducida por su propio Arcángel.

Los nombres arameos de los Arcángeles no son simplemente "nombres" pues ellos denotan la naturaleza, función y grado de cada uno: Miguel, embajador del Sol; Rafael, embajador de Mercurio; Anael de Venus; Casiel, de Saturno; Samael, de Marte; Zacariel, de Júpiter; e Ithuriel, de Urano. Gabriel, es un Ángel, el embajador de Jehová, a través de la Luna.

Además de estos Espíritus de Raza existen los "Espíritus-Grupo", también Arcángeles pero de un orden inferior a los Espíritus de Raza que gobiernan el reino humano. Son vistos en el Mundo del Deseo con forma parcialmente física; un cuerpo de apariencia humana con cabeza de ave o del animal, según la especie que gobiernan. El segmento del cordón plateado del animal está adherido a este "Espíritu-Grupo" y por su medio el animal es guiado desde su nacimiento por lo tanto corre menor riesgo que el infante humano ante un peligro. Las formas del Mundo de Deseo no son, por supuesto, ni rígidas ni fijas y pueden ser consideradas como de carácter simbólico. Así pues, el "Espíritu-Grupo" animal puede algunas veces aparecer con forma humana, con respecto a la cabeza; pero aún entonces la cara de tal ser, muestra una calidad espiritual que sugiere la sublimación de las cualidades anímicas de la especie que gobierna. Así un Espíritu-Pájaro visto cerniéndose sobre una bandada de pájaros muy pequeños de color gris-pardo, se parecería a un Ángel en una nube de alas blancas entre las cuales la cabeza sería distinguible con ojos grises redondos, color de las alas de los pájaros, teniendo una mirada de inexplicable ternura.

(continuará...)

del libro "Temas Rosacruces", Tomo Segundo, 
de la Fraternidad Rosacruz de Max Heindel


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