LA RELIGION CRISTIANA DEL FUTURO
Estamos al final de la era de Piscis, al final de un ciclo; la cristalización del ser humano y el planeta parecen más pronunciadas. Pero ninguna condición imperfecta puede ser permanente. Las Leyes Cósmicas y la Jerarquía a cargo de la evolución se ocupan de que ésta no se detenga. Cada vez que el Sol por precesión entra en un nuevo signo, una nueva Jerarquía se hace cargo. Esta Jerarquía trabaja como una levadura para despertar la conciencia de la humanidad.
Cristo dijo: “Yo no vine a traer la paz, sino una espada”. El sabía que había necesidad de construir para edificar sobre las cenizas. El espíritu en el interior del ser humano comprende la necesidad de estos cambios y les da la bienvenida.
Pero la personalidad no desea ser perturbada. Las Poderosas Inteligencias Espirituales que están a cargo de la evolución, nunca permiten que se haga alguna interferencia que esté relacionada con el Plan Divino.
Cuando se acerca el final de un ciclo, el hombre y toda vida pasan por un período de dura prueba. Los poderes de las tinieblas y todo el mal que ha sido creado por los seres humanos, son liberados de su prisión en el séptimo estrato de la Tierra por las Jerarquías Cósmicas. El ser humano tiene que enfrentarse a todas estas fuerzas del mal, para ser purgado de toda cristalización. Sistemas de gobierno, sistemas de educación, sistemas religiosos, son purgados inexorablemente. Todo lo negativo acumulado en la séptima capa de la Tierra que retarda el progreso humano, es lanzado hacia la superficie para ser transmutado. El ser humano tiene que enfrentarse a todas estas fuerzas que son de su propia creación.
San Juan nos habla en la Revelación, de un libro de siete sellos que solo el Cristo podía abrir y de un abismo sin fondo. El libro de los siete sellos es el hombre con sus siete centros espirituales dormidos. El abismo sin fondo es la séptima capa de la Tierra en donde se va acumulando todo el mal creado por el ser humano.
Los riesgos que enfrenta hoy toda la humanidad son la consecuencia del impacto de estas fuerzas demoníacas liberadas. El grano está siendo separado de la paja. La semilla de los frutos pioneros está siendo seleccionada; los pioneros que renacerán en la venidera Era Acuariana, están probando ahora su capacidad para mantenerse firmes y esto será una recapitulación de lo ocurrido a los antiguos Atlantes después del diluvio.
En la quinta Revolución del actual Período Terrestre, habrá una prueba definitiva para toda la humanidad, pero solamente unas tres quintas partes lograrán superarla. En la venidera Era Acuariana, el desarrollo será igual tanto para el hombre como para la mujer. La mujer, con su cuerpo vital positivo, tendrá ventajas sobre el hombre. La moral será un factor sobresaliente.
La superficie total de la Tierra y su atmósfera serán alteradas. Habrá cambios en los distintos órganos del cuerpo físico como los riñones, el hígado, el corazón, las glándulas adrenales y en los ojos de los seres humanos. La sangre alcanzará un grado mayor de individualización.
Un nuevo elemento está descendiendo ya hacia el planeta: un súper hidrógeno, que es una combinación de agua y fuego. Del mismo modo que los antiguos Atlantes, que no habían construido sus pulmones embrionarios no pudieron asimilar el oxígeno después del diluvio y perecieron, así también los seres que no hayan construido su cuerpo alma, no podrán asimilar el nuevo elemento que está descendiendo e igualmente perecerán.
El cuerpo alma es un cuerpo de luz, que se construye con los dos éteres superiores del cuerpo vital, que son el luminoso y el reflector, por medio de una vida de pureza y de servicio amoroso y desinteresado al prójimo. San Pablo nos habla de él en la primera carta a los Corintios. El cuerpo alma no debe ser confundido con el alma que lo interpenetra.
El Auxiliar Invisible que lo utiliza en sus vuelos del alma, sabe que es tan real y tangible como el cuerpo denso con su sangre y carne. Pero dentro de ese cuerpo alma, llamado también Manto Dorado Nupcial, hay algo intangible, indescriptible, que evade todos los esfuerzos para ser examinado y sin embargo está allí, tan claro y real como el vehículo que recubre. No es vida, no es amor, no es belleza, no es sabiduría; no tiene que ver con ningún concepto humano. En realidad, es la suma de todas las cualidades, atributos y conceptos del bien intensificados en forma inconmensurable.
Aunque fuéramos despojados de todo lo que poseemos, esa realidad permanecería y seríamos ricos con su posesión. Por medio del cuerpo alma es que percibimos el poder con el que el PADRE nos atrae.
A ese algo indefinible, indescriptible, interno, se refería el Cristo cuando dijo: “Nadie viene a mí si no es atraído por mi Padre”. Del mismo modo que el fuego está oculto en la llama que lo envuelve y encierra, ese algo sin nombre se oculta en el cuerpo alma.-
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Estimados amigos, a continuación transcribimos un escrito muy interesante, de autor desconocido, que nos invita a meditar sobre la crisis que vive toda la humanidad.
Nos quedamos dormidos en un mundo y despertamos en otro.
De repente Disney quedó sin magia, París ya no es más romántica, Nueva York ya no se para erguida, la muralla china no contiene y la Mecca quedó vacía.
Los besos y abrazos se transforman en armas y dejar de visitar a nuestros padres y amigos constituye un acto de amor.
De repente nos damos cuenta que el poder, la belleza y el dinero no sirven para nada y de ninguna manera garantizan el oxígeno tan necesario para poder sobrevivir.
El mundo sigue su curso y es realmente precioso. Solo enjaula en estos momentos a los seres humanos.
Pienso que nos está dando un mensaje.
“Recuerda que no eres tan necesario. Sin vos el aire, la tierra, el agua y el cielo están bien. Cuando regreses, recuerda que eres mi invitado. No mi dueño”.
Piensa que nos está dando un mensaje:
Agradecemos al Sr. Raúl Sasia, por este aporte
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